Tuenti: la red social española que marcó a toda una generación

Viernes por la tarde. Tras una semana intensa de exámenes, finalmente llegas a casa para disfrutar de un merecido descanso. El televisor está encendido y activas la videoconsola, entrando en el mundo postapocalíptico de Fallout 3. El ordenador, también en marcha, reposa a tu lado. De pronto, una notificación capta tu atención. En la esquina superior izquierda de la pantalla, unas letras verdes brillan, indicando que has recibido un nuevo mensaje. Al abrirlo, lees: "¡Mañana a las 18:00h celebro mi cumpleaños! Como de costumbre, tendrá lugar un increíble botellón en el sitio de siempre. ¡Nos vemos allí!". Ese mensaje no llegó a través de MSN Messenger, sino de una red social que estaba empezando a cambiar la forma en que te comunicabas con tus amigos.

Los de mi quinta fuimos la primera hornada de chavales y chavalas jóvenes que teníamos acceso a Internet desde la comodidad de nuestras casas, por supuesto, pasando por los anteriores tiempos en los que acudíamos a los Cibercafés a jugar al Counter-Strike, a intentar ligar en Terra Chat o a mandarnos e-mails, (lo que por aquellos tiempos se conocían popular y ridículamente en España como "Emilios"). Pero cuando llegó definitivamente a nuestros hogares la red de redes, muchos entramos en ese trance en el que las posibilidades de su uso eran casi ilimitadas. La primera década de los 2000 fue un momento de descubrimiento, con aquellas webs todavía en evolución o la llegada del eMule, pero también, comenzaron a nacer las primeras redes sociales, como serían Facebook, MySpace y, por supuesto, la que marcaría a una generación entera, Tuenti, a la que se le bautizó con ese nombre por su parecido a «tu identidad», además de su alusión al rango de edad al que iba enfocado: "twenty" (veinte en inglés).

Corría el año 2006, cuando un californiano de nombre Zaryn Dentzel, que debido aun intercambio de estudios vivió un tiempo en Cabeza del Buey, (Badajoz), Poco después, decidió afincarse en España. Ésta fue la cara más visible del proyecto, pese a que el prototipo inicial fue creado por Félix Ruiz, aunque también participarían Joaquín Ayuso, Kenny Bentley y Adeyemi Ajao.

Dentzel y Bentley, ambos paisanos, ya habían trabajado en un prototipo de red social previamente en Estados Unidos. Mark Zuckerberg estaba triunfando ya con Facebook, que fue un éxito rotundo y se estaba expandiendo a nivel mundial. Trabajaron en un concepto similar, hasta que en el año 2006 vería la luz por primera vez la red social patria, Tuenti.

Era un concepto nuevo, y supieron adaptarse y seleccionar los target adecuados, ya que se dirigió inicialmente a universitarios y usuarios jóvenes. También supieron generar una necesidad para entrar y formar parte de ella, ya que contaban con el factor exclusividad, cosa muy atractiva entre su público. Sólo se podía acceder mediante invitación de otro usuario ya registrado, (más tarde se retiraría esta práctica). Tuenti estaba en marcha y la acogida fue enorme durante los primeros meses entre los adolescentes españoles de la época.

La plataforma creció rápidamente, y en 2009 ya se había consolidado como la red social más popular en España,. En 2010, Tuenti alcanzó los 10 millones de usuarios, la mayoría de ellos población juvenil de entre 15 y 20 años. Eran unas cifras brutales. 

Habían creado una rutina, y raro era el día que no visitabas tu perfil para ver si te habían escrito un mensaje privado, o habrían subido una foto en la que estuvieras "etiquetado". Eran los tiempos de las cámaras digitales tipo Olympus FE-230 o Sony Cyber-shot, que captaban los momentos más vergonzantes de aquellas tardes con tus amigos, para luego ser expuesto públicamente ante todos los contactos, en los que también se podían hacer comentarios y conocer gente nueva. Se popularizó el concepto "fototuenti", en especial para los primeros selfies grupales en eventos, viajes de fin de curso o en garitos. Sí, amigos más jóvenes, eso ya existía hace casi veinte años atrás. Además, con el tiempo se incluyó un chat en directo para hablar directamente con tus contactos e incluso minijuegos para jugar online.

Sin embargo, el éxito no fue eterno. En 2010, la plataforma empezó a mostrar signos de agotamiento. La migración masiva de usuarios que iban creciendo y entrando en edad más adulta, demandaban otro tipo de contenidos que ya comenzaban a ofrecer Twitter o Facebook, junto con el auge de nuevas redes como Instagram y Snapchat, debilitó aún más su base de consumidores. Por lo que sus directivos se plantearon la venta de Tuenti. Tras negociaciones, la red social que había sido la más famosa del país fue traspasada a Telefónica por 70 millones de euros.

Con el auge de los nuevos teléfonos móviles con acceso a Internet, Telefónica (actualmente Movistar), tenía interés en la base de usuarios de Tuenti, y transformó la red social en un operador de telefonía móvil tipo lowcost que fuera dirigido principalmente a la población joven. Ofrecía tarifas de llamadas y datos, integrando algunas características de la red social original en una app móvil. Esto permitía llamadas incluyendo mensajes gratuitos entre usuarios de esta compañía, intentando fomentar la esencia comunitaria que había sido Tuenti.

A pesar todos los esfuerzos, la red social fue perdiendo relevancia, y unos años después, comenzaron los rumores sobre su cierre definitivo. Aunque Telefónica lo desmintió a través del diario El Mundo, estaba claro que los tiempos dorados de Tuenti habían llegado a su fin. En el año 2016 se informó a los usuarios de esta decisión, aunque el desenlace definitivo de su historia acabó en abril de 2022, cuando se integró en la compañía O2. Pero poco antes de echar el cierre definitivo a la red social seis años antes, se creó una plataforma de descarga de todas las fotos que teníamos alojadas en nuestro perfil. Después de años de olvido, volver a ver aquellos documentos gráficos nos recordaban la leyenda viva de nuestra juventud. Con más vergüenza que orgullo, pudimos contemplar lo que posiblemente fue la época más despreocupada y feliz de nuestras vidas.

DaviOne

22 de mayo 2024