Canal + y la "película de los viernes"

Hay recuerdos que por algún motivo todo el mundo guarda en su memoria. Sucesos históricos como la llegada del ser humano a la Luna, la caída del Muro de Berlín o cuando se le vieron los huevos a Butragueño en directo. Hechos que sin saber por qué se han mantenido en nuestras retinas a lo largo de los años, ya sea por su relevancia histórica o porque han marcado las vidas de aquellos que lo vivieron. Pero hay algo que me resulta curioso, e incluso podría decir inquietante, ya que por sí mismo no entra en ninguna de las categorías anteriores. ¿Por qué digo esto? Continúa leyendo.

Vayamos al año 1990, en la radio sonaba "Blaze of Glory"de Bon Jovi, los Detroit Pistons de los Bad Boys ganaban su segundo anillo de la NBA y Super Mario World veía la luz en Japón para Super Nintendo. La década no estuvo nada mal. Y entre toda la televisión analógica que teníamos ya por aquel entonces, surgió algo nuevo y revolucionario, más aún que el Teletexto que tanto dio que hablar unos años antes. Y es que en junio de 1990, Canal + España comenzó su emisión.

Todavía tengo grabado en mi cerebro cuando mi padre apareció con un nuevo aparato de color negro y una misteriosa "llave" blanca que introdujo cuidadosamente en una ranura. Yo no sabía qué demonios era eso que conectaba mi progenitor mediante un euroconector, —posiblemente la peor conexión jamás creada—. Finalmente, y una vez realizada la instalación, encendió la televisión y sintonizó un canal repleto de rayas y formas, así como un audio ininteligible, casi extraterrestre. De pronto, encendió aquella caja y todo tomó sentido. Como por arte de magia, esas imágenes abstractas se transformaron en un nuevo mundo, ya que desde ese mismo día, empezó una nueva etapa en mi vida que me regaló tantas horas de entretenimiento como suspensos en las notas del siguiente curso.

Como he dicho en alguna ocasión, tuve la gran suerte de ser uno de los privilegiados que pudo tener acceso a esta televisión, ya que era algo exclusivo que casi nadie más tenía, y podía presumir de todos los contenidos que se me habían concedido. No sólo se podían ver los grandes partidos de La Liga española, sino que también fue como descubrí la Football League First Division, renombrada a Premier League en 1992. El estreno de los viernes era el evento de la semana en mi casa, donde nos reuníamos toda la familia a ver la película emitida en cines unos meses atrás, y mucho tiempo antes que en cualquier canal de la televisión en abierto. 

A medida que avanzaban los años, fueron incluyendo cada vez más contenido, desde Del 40 al 1, la versión televisiva de Los 40 Principales, por aquel entonces presentado por Fernandisco, el informativo CNN+ o desde el 1995, Las noticias del guiñol con la parodia de Hilario Pino. Por aquella mitad de década, tuve mi primer acercamiento de verdad a la NBA, cuando descubrí las apasionadas narraciones del tristemente fallecido Andrés Montes junto a Antoni Daimiel y Santiago Segurola. Y, por supuesto, "Batman: la serie animada", entre otras. Era normal que se me fuera un poco la olla, dedicando demasiadas horas a todos esos estímulos que se me ofrecían de manera constante y pocas a los estudios.

Como no podía ser de otra forma, muchas personas no pretendían pagar la suscripción, ya que por aquel entonces su precio era de 3.000 pesetas, unos 18 euros, pero claro, hablamos de hace más de treinta años. Por esa razón, se comenzó a trabajar en la manera de poder visualizar el canal de manera gratuita, pero el pirateo de la señal en los 90 no era nada fácil, ya que Internet todavía no estaba muy integrado en los hogares, y la información era limitada. Además de decodificadores trucados, existieron programas informáticos para las tarjetas de televisión de los ordenadores tipo WinTV, como el conocido MoreTV para la imagen y Wilma para el audio. Sí, eran Los Picapiedra.

A lo largo de los años, el canal de origen francés sufrió varias modificaciones, ya que la llegada de Vía Digital rivalizó con Canal Satélite, plataforma que contaba con cinco canales temáticos: Cinemanía, Documanía, Cineclassics, Minimax y Sportmanía. Estas dos plataformas iniciaron la famosa "guerra del fútbol", realizando estrategias empresariales para hacerse con los derechos del deporte rey. Perdiendo esta batalla Vía Digital, finalmente acabó fusionándose con Canal Satélite, renombrándose en Canal Satélite Digital, quienes tuvieron los derechos casi al completo del fútbol español, incluyendo además contenidos pay-per-view (pago por visión) tanto en cine como en deportes. Años después la plataforma fue renombrada a Digital +, y más adelante de nuevo a Canal +. Hasta que finalmente, en el año 2015, fue absorbido por completo por la compañía Movistar, cambiando una última vez su nombre a Movistar +.

Como mencionaba al comienzo de este artículo, hay recuerdos que se mantienen en la memoria popular, y aparte de todos los contenidos que ofrecía Canal +, había uno en concreto que es precisamente lo que todo el mundo menciona al sacar el tema de la plataforma. Los viernes por la noche había película de estreno, pero después, había otro tipo de estreno, siendo también el motivo principal por el que mucha gente acababa cayendo en una suscripción, por mucho que lo negasen o intentaran desviar la atención mintiendo como locos, porque querían "ver documentales de calidad". La película porno de las madrugadas de los viernes se convirtió en un fenómeno de culto entre la población, con personas que afirmaban que disponían de trucos para poder verlo codificado, acercando los ojos a una distancia concreta y después haciendo unos pestañeos precisos, (no funcionaba). E incluso leyendas urbanas alrededor de este mito, con cachivaches que habían conseguido de China el primo del amigo del vecino. Una cultura de la mentira y del ingenio que fue provocada con el único objetivo de ver una película porno, pero no una cualquiera como las de los canales locales de televisión, una de una calidad que solo podía ofrecer el "buen gusto" del encargado de selección de la "película de los viernes" de Canal +.

DaviOne

21 de noviembre 2023